Los mercados financieros alrededor del mundo han sido sacudidos mientras un éxodo de
trabajadores extranjeros de China intensificaron temores sobre el impacto del coronavirus en la segunda economía más grande del planeta.
Según reportó el diario inglés The Guardian, las compañías han empezado a sacar a su personal de la provincia de Hubei ante el surgimiento del brote o restricciones impuestas en los viajes en el personas a lo largo de Asia, diciéndole a cualquier trabajador que visitó la región permanecer en casa.
Las acciones globales cayeron a pesar de que las autoridades chinas intensificaron su respuesta, con más de 2 mil 700 casos y 81 muertes confirmadas por la enfermedad.
El FTSE 100, el índice bursátil más importante de Reino Unido, cerró a la baja por más del 2 por ciento, o 174 puntos, en 7 mil 412, y otros mercados europeos sostuvieron fuertes pérdidas mientras las preocupaciones se incrementaron sobre la economía de China mientras intenta recobrarse de su largo conflicto comercial con los Estados Unidos.
Las acciones bajaron en Wall Street y el Dow Jones Industrial Average cayó cerca de 400 puntos, cayendo de niveles altos récord a inicios de este año.
El grupo autromotriz francés Peugeot dijo que estaba trabajando en evacuar a 38 empleados internacionales y sus familias de Hubei, donde tiene tres sitios de producción.
Otras compañías, incluyendo la firma bancaria Stándard Chartered, impusieron prohibiciones de viaje a la ciudad de Wuhan. El banco de inversión estadounidense Goldman Sachs también restringió los viajes, mientras el banco HSBC dijo que estaba monitoreando de cerca la situación por la seguridad de sus empleados.
En una señal del impacto en los negocios internacionales, el banco suizo Credit Suisse, envió a personal en Hong Kong una carta diciéndoles que trabajaran en casa y no viajaran a sus cuarteles generales en la ciudad si ellos habían visitado el continente en los últimos 14 días. El banco está ofreciendo además chequeos de temperatura en su oficina principal.
Standard Chartered, la cual está ubicad en Londres pero hace muchas de sus ganacias y tienen a la mayoría del personal en Asia, está reduciendo el trabajo cara a cara en China y Hong Kong junto con restricciones a los viajes. Está ofreciendo entrenamiento en desinfección y limpieza profunda de edificios, enseñando al personal a reconocer síntomas y proveer máscaras y desinfectantes de manos.
mercados a lo largo de Europa, incluyendo Burberry y LVMH. Tales firmas usualmente tienden a beneficiarse de un alza en las ventas por las celebraciones del Nuevo Año Lunar.
Aerolínea y grupos hoteleros, quienes podrían enfrentar pérdidas debido a las prohibiciones de viajes, cayeron bajo una fuerte presión de venta, mientras firmar mineras que se han beneficiado del crecimiento de la manufactura china en años recientes también cayeron en valor.
La compañía minera global Anglo American y la multinacional con sede en Suiza Glencore,
dedicada a la compraventa y producción de materia primas y alimentos del mundo, también
sufrieron, mientras los precios del barril de petróleo cayó alrededor del tres por ciento por debajo de los 60 dólares entre preocupaciones de que el brote pudiera exacerbar un recesión económica en China y el resto del mundo.
Los activos de refugio seguro como el oro y los bonos de gobierno aumentaron. Los mercados financieros chinos estuvieron cerrados por el Nuevo Año Lunar, mientras que Bloomberg informó que los mercados bursátiles en el país podrían permanecer cerrados hasta al menos el próximo lunes cuando Beijing lidie con el empeoramiento de la crisis.
Después del brote del SARS en el 2003, el Producto Interno Bruto de China cayó a un 9.1 por ciento en el segundo trimestre del 11.1 por ciento en el periodo previo de tres meses, mientras el gobierno impuso restricciones a los viajes. De cualquier forma, el crecimiento del PIB se recobró a 10 por ciento en la segunda mitad del 2003.
Esta vez, la economía de China es mucho más grande y más conectada a la economía global. Los analistas señalan que la respuesta del gobierno al brote del coronavirus parece ser más fuerte y transparente, lo cual podría ayudar a limitar el impacto.
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