Durante esta semana SpaceX ha colocado en el espacio con éxito más de 50 satélites que se unen para el programa Starlink, el cual plantea ofrecer internet de banda ancha, baja latencia y cobertura a nivel mundial a bajo costo.
A pesar de las críticas que se han hecho sobre el impacto que tendrá dicho programa en el cielo nocturno, la pregunta de muchas personas era sobre las fechas de cuándo comenzará este ambicioso proyecto, el cual hasta el día de hoy cuenta con más de 420 satélites en órbita.
Musk ha hecho público por medio de su cuenta de Twitter que promete una beta privada cerca de los próximos tres meses para después dar inicio a una beta pública aproximadamente tres meses después de la primera.
La prueba beta inicial se aplicará a aquellos ubicados en altas latitudes, de acuerdo con Musk. Hasta la fecha, SpaceX ha dicho que el servicio Starlink estará inicialmente disponible para clientes en Canadá y en el norte de los Estados Unidos en 2020, con una expansión adicional del servicio a otras partes del mundo a lo largo de 2021. En Twitter en respuesta a una pregunta sobre si Alemania es considerada como lugar de alta altitud, a lo que Musk dijo que sí, lo que indica que el servicio beta al menos puede estar disponible en más mercados que Estados Unidos y Canadá antes del próximo año.
A fines del año pasado, Musk tuiteó diciendo que estaba usando una conexión satelital Starlink para hacerlo, y desde entonces la compañía ha lanzado seis lotes de 60 satélites cada uno para construir su red. Los pequeños satélites funcionan volando alrededor de la Tierra en órbita baja, pasando la conexión entre ellos para garantizar un servicio constante a las estaciones terrestres. Orbitan más bajo que los satélites de comunicaciones geoestacionarios, lo que proporciona beneficios de latencia y velocidad, pero no permanecen en una posición fija, por lo que se requiere una gran cantidad de ellos para proporcionar una conectividad constante.
SpaceX todavía tiene otros obstáculos que superar para hacer su cronograma, incluida la preparación y el lanzamiento de más misiones de Starlink a pesar de las desafiantes condiciones de trabajo existentes debido a la pandemia de COVID-19. La compañía también necesita obtener autorización de los reguladores canadienses de Internet y de operaciones satelitales antes de que el servicio se active en ese país, y todavía no figura como proveedor autorizado en el sitio web oficial del gobierno canadiense.
Starlink finalmente tiene como objetivo proporcionar conectividad de banda ancha de alta velocidad y bajo costo a los clientes a nivel mundial, con el objetivo específico de ofrecer servicio a los clientes que actualmente no tienen acceso confiable o de calidad debido a su ubicación remota.
Varios proyectos de satélites y otros proyectos tienen como objetivo abordar esta brecha, incluido Loon, propiedad de Alphabet, que utiliza globos estratosféricos para actuar como torres celulares para proporcionar acceso a lugares de difícil acceso.
Fuentes: TechCrunch, CNET
Comments