Desde hace unos años hay una tendencia que ha ido en crecimiento y a la cual deben prestar atención las agencias de viajes y negocios relacionados con el turismo, es el llamado “bleisure”.
El término se compone de las palabras en inglés business (negocios) y leisure (ocio), y trata de cuando una persona realiza un viaje por cuestión de trabajo, pero decide alargar su estadía un poco para pasear, conocer o disfrutar el lugar que visita, simplemente es aprovechar y tomarse unas “minivacaciones”.
Esto se ha convertido poco a poco en un nicho de mercado, se menciona que un 67 por ciento de los viajeros de negocios realizan esta práctica, por otro lado, según un estudio de Mastercard e IE llamado “High value city tourism” (turismo de ciudad de alto valor), más de la mitad de colaboradores de una empresa extienden su estadía uno o más días para poder hacer turismo.
De acuerdo al Bleisure Report de la consultora Bridge Street Hospitality, el 83 por ciento de los encuestados dedica tiempo de su viaje para explorar la ciudad, un 60 por ciento reconoció haber disfrutado un viaje “bleisure” y un 30 por ciento declaró haber agregado dos días de vacaciones a su viaje de negocios. Incluso un 54 por ciento reconoció haber llevado a un miembro de la familia para disfrutar los momentos de descanso.
Compagina esto con un estudio del año 2018 de Expedia Group Media Solutions, el cual refiere que el 60 por ciento de los viajes de negocios en Estados Unidos incluía un elemento de relajación, contra un 43 por ciento del año 2016. Los viajes “bleisure” internacionales en cambio se dispararon entre los estadounidenses, al pasar del 52 por ciento en el 2016 al 80 por ciento dos años después.
Entre lo que hace a un destino más atractivo para este tipo de viajes, Expedia refiere que el 60 por ciento opina es la comida y los restaurantes del lugar, el 58 por ciento prefiere las playas, el 55 por ciento el clima, el 49 por ciento las bellezas naturales y el 47 por ciento la infraestructura histórica.
Agrega que los viajes de dos a tres noches de duración tienen el potencial de pasar de negocios a “bleisure”.
Esta dinámica está llevando a un “boom” del turismo urbano en los últimos años en distintas partes del mundo. Gracias a este binomio de trabajo y descanso muchas personas aprovechan para conocer nuevas ciudades, y se está convirtiendo en un deseo compartido.
Otro estudio del Barómetro Turístico Braintrust revela en particular que en España el 36 por ciento de los viajeros de negocios aprovechó para realizar turismo de placer.
El “bleisure” reduce la estacionalidad de la industria turística, una cuarta parte de los viajes se realizan en julio y agosto, quedando un 75 por ciento repartido en el resto del año.
Las grandes capitales como Nueva York, Londres, París, Tokio, Madrid y Shanghái, son los destinos favoritos de esta tendencia.
Algunas cadenas hoteleras, como la española Meliá Hotels Internacional, ya están transformando sus ofertas para ofrecer productos “bleisure”, combinando los negocios con lo urbano. Añaden un componente “lifestyle”, el cual incluye experiencias gastronómicas, culturales, deportivas y de interacción social.
Su objetivo, señalan, es buscar “un equilibrio entre trabajo y placer para conseguir armonía entre la realización profesional y satisfacción personal”.
Es importante para la industria turística poner manos a la obra porque algunos datos arrojan que este tipo de turista gasta 32 por ciento más que el convencional, además que se trasladan con frecuencia, el 38 por ciento de ellos llega a viajar cada dos meses.
Entre lo que buscan ofrecer los hospedajes destaca la conectividad con wifi de banda ancha, minibares gratuitos, Chromecast en las habitaciones, lobbies y lounges para los encuentros y reuniones, terrazas “rooftop” para la socialización, tener una localización céntrica, buena oferta gastronómica, facilidades para hacer deporte, entre otros.
El perfil de estos turistas abarca el ámbito de labor en la tecnología, finanzas, sanidad, administración pública y educación, siendo las conferencias el principal motivo de su visita, seguidas de las reuniones comerciales y el “team building”. Además, corresponde un poco con la generación millenial, de entre 25 a 35 años, quienes son flexibles y trabajan desde casa o durante la noche para tener actividades más relajadas en las horas de trabajo tradicionales.
La consultora Report Consultant estima que el “bleisure” para el año 2026 generará más de mil 400 millones de euros en España, con una previsión de crecimiento anual del 4.1 por ciento.
El cambio de concepto de eficiencia empresarial, a un modelo más flexible, le da empuje a esta nueva vertiente turística. Las empresas entienden que para tener un mayor rendimiento de sus colaboradores ellos requieren descansar, y por ello les permiten extender sus días en el destino.
También el fenómeno debe llevar a las empresas a evaluar ciertos aspectos, como su responsabilidad en caso de accidente en los días que decide descansar el colaborador, y también aprender a respetar su privacidad en esos momentos y no llamarle para recordarle el estrés del que trata de huir.
De igual manera la organización de este tipo de viajes corporativos puede resultar complicado para la unidad de negocio, y lo ideal sería la externalización de estos servicios a agencias con experiencia y trayectoria reconocida.
Fuentes:
https://bit.ly/2WOFPGQ
https://bit.ly/2FUCG1w
Comments