Intel busca inversión de Apple para fortalecer su división de semiconductores, según Bloomberg

Intel ha iniciado conversaciones con Apple para asegurar una inversión estratégica que respalde la expansión de su división de fabricación de semiconductores, de acuerdo con información publicada por Bloomberg. Este movimiento representa un intento de la compañía por consolidar su posición en un mercado altamente competitivo, dominado actualmente por fabricantes asiáticos como TSMC y Samsung.

La posible inversión de Apple no solo implicaría un respaldo financiero, sino también una colaboración tecnológica de gran alcance. Intel busca atraer socios que le permitan acelerar el desarrollo de procesos de fabricación avanzados, en particular su tecnología de 18A, una de las apuestas más ambiciosas de la compañía para recuperar liderazgo en la producción de chips de alto rendimiento.

Para Apple, el acuerdo podría traducirse en una mayor diversificación de su cadena de suministro, reduciendo su dependencia de TSMC en Taiwán. Esto fortalecería la resiliencia de su ecosistema de hardware, especialmente ante tensiones geopolíticas y los riesgos asociados a la concentración de la producción en Asia.

Contexto y competencia global

El interés de Intel en atraer capital externo se enmarca dentro de su estrategia para revitalizar su negocio de manufactura, tras varios años de pérdida de participación en el mercado frente a competidores que han logrado procesos de litografía más eficientes. Con el auge de la inteligencia artificial, los chips avanzados se han convertido en el nuevo motor de crecimiento tecnológico, y las alianzas estratégicas son esenciales para sostener la innovación y la capacidad de producción.

Apple, por su parte, continúa explorando oportunidades para optimizar sus costos y garantizar el suministro de componentes esenciales para sus dispositivos. Aunque la empresa de Cupertino ha desarrollado sus propios procesadores (como la línea M y A), sigue dependiendo de fabricantes externos para su producción masiva, lo que hace que una alianza con Intel resulte estratégica a largo plazo.

Implicaciones financieras y tecnológicas

De concretarse la inversión, Apple podría adquirir una participación significativa en la división de Intel Foundry Services, lo que impulsaría el valor de la compañía y consolidaría su relevancia dentro del ecosistema de semiconductores occidentales. A su vez, Intel obtendría el impulso financiero necesario para avanzar en su hoja de ruta tecnológica y cumplir con los ambiciosos objetivos establecidos para 2026.

El acuerdo también podría recibir apoyo político en Estados Unidos, donde las autoridades promueven la relocalización de la producción de chips mediante incentivos fiscales y subsidios federales, como parte de la Ley CHIPS. La colaboración entre ambas empresas contribuiría a fortalecer la soberanía tecnológica y reducir la dependencia de la cadena de suministro asiática.

Perspectiva del mercado y próximos pasos

Los analistas destacan que esta posible alianza podría reconfigurar el equilibrio global de la industria. Una colaboración entre Intel y Apple no solo tendría impacto financiero, sino también simbólico: uniría a dos de las empresas más influyentes del sector tecnológico estadounidense en un momento crítico para la autonomía industrial del país.

Aunque las conversaciones aún están en una etapa temprana, el interés mutuo demuestra que las grandes tecnológicas están dispuestas a cooperar para asegurar su futuro en el competitivo mundo de los semiconductores. Si se concreta, el acuerdo marcaría un paso decisivo hacia una nueva era de colaboración estratégica entre fabricantes y desarrolladores de tecnología avanzada.