La empresa Brasileira de Aeronáutica, Embraer há comunicado que se ha iniciado un proceso de arbitraje en contra de Boeing luego de que el fabricante de aviones cancelara de manera abrupta un acuerdo de 4.2 mil millones de dólares que tenía más de dos años en proceso.
Esta acción ha ocasionado que las acciones de Embraer cayeran hasta un 16% en Sao Paulo, algo que no se había visto desde hace más de 8 años a causa de la noticia de la cancelación del acuerdo. Esto ha llevado a la conclusión de que los inversores esperaban que el contrato se llevará a cabo.
Embraer esperaba vender el 80% de su rentable unidad de aviación comercial a Boeing y beneficiarse del poder de marketing de la estadounidense para aumentar las ventas de sus aviones regionales E2 elogiados por su eficiencia de combustible, incluso cuando las entregas han sido lentas.
El acuerdo de dos años se canceló el sábado por la noche después de una fecha límite diseñada para cerrar las brechas entre la división de aviación comercial de Embraer y Boeing entró y salió sin progreso. Embraer, sin embargo, dijo que las luchas 737 MAX de Boeing, así como sus dificultades con el coronavirus, lo llevaron a rescindir erróneamente el desafortunado acuerdo.
«Boeing ha trabajado diligentemente durante más de dos años para finalizar su transacción con Embraer», dijo Marc Allen de Boeing, quien dirigió las operaciones de asociación y grupo de Embraer. «En los últimos meses, tuvimos negociaciones productivas pero finalmente infructuosas sobre condiciones de MTA insatisfechas».
«Todos buscamos resolverlos antes de la fecha de finalización inicial, pero no sucedió», dijo Allen. «Es profundamente decepcionante. Pero hemos llegado a un punto en que la negociación continua dentro del marco de la MTA no va a resolver los problemas pendientes».
El movimiento para cortar los lazos con Embraer sugiere el camino de Boeing hacia lo que el CEO David Calhoun ha llamado la «nueva realidad» en la industria aeroespacial mundial, donde unos 16.700 aviones comerciales, más de dos tercios de la flota global, permanecen en tierra en medio de coronavirus. Restricciones de viaje principales, continúa a buen ritmo.
Airbus SE, el principal rival europeo de Boeing, dijo al personal el sábado que el mayor fabricante de aviones del mundo está desangrando efectivo a una velocidad sin precedentes y advirtió que su supervivencia está en cuestión si no actúa con recortes de empleos y retrocesos en la producción.
La semana pasada, Bloomberg informó que Boeing está listo para reducir la producción si es su 787 Dreamliner, mientras que revela más despidos y compras de personal, y se dirige a su informe de ganancias del tercer trimestre el miércoles. Los pronósticos de FactSet sugieren que registrará una pérdida de $ 1.35 por acción en ventas de $ 17.3 mil millones.
El mes pasado, Boeing dijo que necesitaba un mínimo de $60 mil millones en ayuda gubernamental para apoyar los 2.5 millones de empleos de la industria aeroespacial de Estados Unidos. El fabricante de aviones no indicó qué parte de la ayuda necesitaría directamente, pero señaló que depende de al menos 17,000 proveedores en todo el país y ocupa el puesto del mayor exportador de EE. UU.
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