En un movimiento sin precedentes en la industria de tecnología wearable, Apple ha anunciado la suspensión de las ventas en EE.UU. de sus modelos de smartwatches Series 9 y Ultra 2.
Esta decisión, que entrará en vigor a partir del 21 de diciembre en su tienda en línea y después del 24 de diciembre en sus tiendas físicas, es el resultado de una disputa de patentes con Masimo, una empresa de tecnología médica, sobre la función de sensor de oxígeno en sangre de los dispositivos.
Masimo demandó a Apple en 2021, alegando violaciones de patentes relacionadas con el monitoreo de oxígeno en sangre basado en luz. En octubre de 2023, la Comisión de Comercio Internacional de EE.UU. (ITC) apoyó un fallo judicial previo que confirmaba que el Apple Watch violaba las patentes de Masimo. La decisión de la ITC impide todas las importaciones de los modelos Apple Watch Series 9 y Ultra 2 a EE.UU. después del 25 de diciembre.
Apple, en respuesta a la decisión de la ITC, ha decidido cumplir de manera preventiva con la orden, aunque planea apelar la decisión ante el Tribunal Federal de Circuito de EE.UU. el 26 de diciembre si es necesario. Además, Apple está explorando una variedad de opciones legales y técnicas, incluyendo posiblemente la desactivación de la función de oxígeno en sangre para evitar infringir las patentes. La compañía ha expresado su desacuerdo con la orden de la ITC y está tomando todas las medidas necesarias para que los modelos Series 9 y Ultra 2 estén disponibles nuevamente para los clientes en EE.UU. lo antes posible.
Por su parte, Masimo ha lanzado su propio smartwatch, que Apple ha calificado como una imitación del Apple Watch. En octubre de 2022, Apple presentó dos demandas por infracción de patentes contra Masimo, afirmando que esta había copiado características patentadas del Apple Watch.
Este desarrollo representa un desafío significativo para Apple en uno de sus mercados más grandes y podría tener implicaciones más amplias para la industria de dispositivos wearables en términos de competencia y respeto por la propiedad intelectual. El resultado de esta disputa y las medidas que Apple tome en respuesta podrían sentar precedentes importantes en el ámbito legal y comercial de la tecnología.
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