Apple impugna en los tribunales la multa antimonopolio impuesta por la UE de 587 millones de dólares
- Ameis Lectores A.C.
- 7 jul
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Apple ha presentado un recurso ante el Tribunal General de la Unión Europea en contra de la sanción impuesta por la Comisión Europea en abril, que asciende a 500 millones de euros (aproximadamente 587 millones de dólares) por presuntas prácticas anticompetitivas relacionadas con la App Store.

Argumentos de Apple
En su apelación, Apple califica la multa de “sin precedentes” y argumenta que la decisión exige condiciones que exceden lo que la ley permite. La empresa afirma que los cambios solicitados por la Comisión introducen confusión tanto para los desarrolladores como para los usuarios, y representan una “intervención excesiva” en su modelo de negocio.
Adaptaciones tras la presión regulatoria
En respuesta a la DMA (Ley de Mercados Digitales), Apple ha introducido diversos ajustes en su plataforma en junio de 2025. Entre ellos, la eliminación de ciertas restricciones de “redirección” y la introducción de una nueva estructura de comisiones escalonadas: una tasa fija del 5 % al 13 %, más un recargo de 2 % por adquisición de usuarios, según el nivel de visibilidad deseado en la App Store. No obstante, la firma mantiene que dichos ajustes no cumplen con lo exigido, y que Bruselas ha ampliado de manera “ilegal” la definición de redireccionamiento.
Repercusiones para el entorno digital europeo
El resultado de este litigio judicial puede tener implicaciones de largo alcance para el control regulatorio de las grandes plataformas tecnológicas en Europa. El fallo podría sentar un precedente efectivo sobre los límites de la intervención estatal en ecosistemas digitales cerrados como el de Apple. Para que Bruselas proceda con sanciones adicionales —como multas cotidianas que podrían alcanzar hasta el 5 % de los ingresos medios globales diarios—, debe demostrar que Apple sigue incumpliendo las normativas de acceso justo a la plataforma.
Cronograma y posibles escenarios
El Tribunal General no tiene un plazo establecido, pero cerrar el caso podría llevar entre 12 y 18 meses. Si Apple gana, revertiría la multa y limitaría la capacidad de intervención de la Comisión en decisiones estratégicas. En caso contrario, no solo deberá abonar el monto completo, sino que podría estar sujeta a medidas adicionales en caso de incumplimiento continuo de las órdenes emitidas por Bruselas.
Este caso no solo cuestiona la fuerza de la regulación europea en el ámbito digital, sino también el modelo de negocio de plataformas cerradas frente al derecho de los consumidores y desarrolladores. El desenlace marcará el equilibrio futuro entre control regulatorio, innovación y competencia en Internet.
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