Paypal dejará de brindar su servicio de wallet o monedero electrónico en México para continuar funcionando como un agregador de pago, esto debido a nuevas regulaciones en las leyes de nuestro país, que entran en vigor el 25 de septiembre.
La compañía ha decidido no solicitar la autorización para operar como una fintech (financiera tecnológica) en el marco de la nueva Ley que Regula a las Instituciones de Tecnología Financiera, donde tendrán que registrarse las empresas de financiamiento colectivo (crowdfunding), los fondos de pago electrónico y aquellos que quieran ser parte de modelos novedosos (los sandbox), ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
La compañía ha señalado que la decisión estriba en que desconocen los alcances que podría tener esta regulación, indica El Economista.
De acuerdo a la regulación del regulador mexicano, un agregador es un participante de la Red de Pagos con Tarjeta que, «al amparo de un contrato de prestación de servicios celebrado con un adquiriente (banco) ofrece a receptores de pagos (comercios) el servicio de aceptación de pagos con tarjetas», los cuales pueden realizarse de forma electrónica, como un sitio de ecommerce o a través de una Terminal de Punto de Venta.
El 26 de agosto pasado Paypal envió una notificación a sus usuarios en la que asentó que realizaría modificaciones en sus acuerdos legales. Esos cambios, que tienen como fecha de ejecutarse el 25 de septiembre, incluyen deshabilitación del uso de balance; así como la respectiva implementación de una función de transferencia automática a una cuenta bancaria del usuario y la modificación de la comisión por conversión de divisas para enviar dinero o efectuar pagos.
De acuerdo a un estudio solicitado por la misma empresa a la consultora IDC, el 62 por ciento de los mexicanos que corresponde a los niveles socioeconómicos A, B y C (alto y medio alto), utiliza un monedero electrónico o wallet digital, una cifra que es mayor incluso a la de países como Brasil y Colombia.
La encuesta se realizó a mil 067 adultos que cuentan con un teléfono inteligente en México, Colombia y Brasil, y que pertenece a los niveles socioeconómicos mencionados. Los encuestados dijeron usar sus dispositivos móviles para transferencias bancarias y pagar servicios, además de que la mayoría cuenta con monedero electrónico, el principal tipo de interacción con las demás empresas de servicios financieros o bancos durante el último año siguieron siendo en las sucursales, ya fuera con los empleados dentro de la institución o en los cajeros automáticos.
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